miércoles, 3 de octubre de 2012

Tarija sugiere el turismo rural como una opción diferente

El turismo rural es una actividad que ha tenido un gran desarrollo en los últimos años a nivel mundial, el mismo tiene sus orígenes en los años 80 a 90, aunque en otras partes del mundo ya se practicaba. En Tarija sucede algo similar y las ofertas de turismo rural se multiplican. En ese momento se empezaron a promover las vacaciones en casas de campo del valle.
El turismo rural puede ser definido como toda aquella actividad desarrollada en el ámbito rural, compuesta por una oferta integrada de servicios relacionados con el entretenimiento. El mismo está dirigido a personas, cuya motivación incluya el contacto respetuoso con el patrimonio natural e histórico, así como también los mueve el interés por la interrelación con la cultura y la comunidad rural.
Es importante para la sostenibilidad de este tipo de turismo que, el mismo sea realizado teniendo en cuenta la autenticidad del lugar. En el valle tarijeño hay emprendimientos que presentamos para que esta primavera y verano puedan disfrutar de nuestra hermosa tierra chapaca.

Masía San Jorge
Masía San Jorge es una Casa de Campo que está ubicada en el valle de Calamuchita distante a 25 kilómetros de Tarija, se encuentra sobre la carretera frente a la iglesia del pueblo. Para poder llegar pueden tomar un vehículo del mercado Campesino sobre la avenida Froilán Tejerina, que sale cada 20 minutos o en la esquina de la terminal de buses.
Esta es una casa de turismo rural, una hacienda antigua que tiene más de 100 años, actualmente mantiene la estructura original de la casa que ha sido acondicionada para recibir al turista con el fin de explotar el turismo rural, rescatando los valores culturales de esta zona potencialmente vitivinícola.
“Este proyecto inició en el 2007”, nos relata el propietario, Sebastián Íñiguez Estensoro y nos cuenta que Masía es una palabra de origen Catalán, que significa Casa Antigua de Campo en la cual se trabaja. Su abuelo Jorge Íñiguez hizo construir la casa para su esposa Aurora Tárraga cuando contrajo matrimonio. En este lugar se conservan objetos antiguos de la época de la Finca San Jorge que acondicionan el lugar.
La hacienda cuenta con habitaciones con camas de dos plazas (20 a 30 $us), que poseen una cocina totalmente equipada para que se preparen sus alimentos. Tiene una capacidad para más de 16 personas y en total posee cinco habitaciones grandes.
En cuanto a la alimentación Sebastián Íñiguez explica que se entrega al hospedado la heladera provista de productos naturales como leche, yogurt y sándwiches. Si es que el huésped quiere algo adicional se lo consigue para proveerle de esto.
Íñiguez dice también que disponen de salones, sala de lectura, un espacio acondicionado con caballetes para los que quieran hacer pintura, se cuenta con bicicletas de paseo (con la característica que son antiguas como la Hércules) y montañeras para hacer circuitos.
Se hace visita a los viñedos de la zona y en la propiedad se puede observar y apreciar variedades nuevas de uvas para la vinificación. Dice además que para hacer más ameno el paseo se coordina con los comunarios de la zona para visitar el entorno de Calamuchita, donde también hay una tienda enoturística “Las Duelas”, en el cual los visitantes pueden degustar de una variedad de vinos.
Tarija Country Club
Tarija Country Club se encuentra ubicado en la comunidad de Tolomosita Oeste a orillas del río, está a 9 kilómetros de distancia y a 12 minutos del centro de la ciudad por carretera asfaltada, el lugar se encuentra establecido sobre dos hectáreas.
Para llegar a este lugar se recorre la carretera que va a San Jacinto, pero antes de llegar al lago hay un desvío de la carretera que va a Tolomosa y se sigue hasta llegar a Tolomosita, se cruza el río y a pocos metros se ubica el Country, desde donde se tiene una vista panorámica de la represa de San Jacinto.
Su gerente General, Fernando Cortez Castillo nos cuenta que el lugar comenzó siendo una casa de campo familiar perteneciente a la familia Cortez, la que empezaron a hacerla más grande, la gente comenzó a preguntar si se alquilaba y de ahí nació la idea de crear el Country Club (Club de Campo) el 11 de noviembre de 2011.
Tarija Country Club, como Fernando Cortez Castillo indica fue pensado para disfrutar del sosiego de la campiña tarijeña, del refrescante contacto con la naturaleza, de la práctica de varios deportes y la reunión cordial entre familiares y amigos; así como la realización de todo tipo de actividades culturales y encuentros de capacitación profesional.
El lugar cuenta con habitaciones matrimoniales (Bs 90), dobles y familiares de 4 personas (Bs 80 cada una), con servicio de ropa de cama y toallas. Las cabañas tienen capacidad para ocho personas y tienen un costo de 650 bolivianos, de 10 cuestan Bs. 750 y de 12 salen Bs. 850, las mismas tienen 2 dormitorios, baño y cocina comedor totalmente equipada. Tarija Country Club tienen una capacidad para 42 personas, en habitaciones.
Fernando Cortez explica que el servicio de desayuno bufet cuesta entre 15 y 18 bolivianos, los refrigerios 10 bolivianos, el almuerzo con postre está a Bs. 30 y la cena a 20 bolivianos. Dice también que en lugar se celebran matrimonios, quince años, cumpleaños, retiros, conferencias y cursos de capacitación.
El Country ofrece la mayor cantidad de actividades pensadas para su diversión y entretenimiento, haciendo de su estadía una experiencia inolvidable, disfrutando al máximo el contacto con la naturaleza. Tanto los huéspedes como la gente que va a acampar o que sólo va a pasar un día de campo pagan 30 bolivianos y tienen derecho a todos los servicios.
Tienen canchas de fútbol, de volibol, de básquet y espacios acondicionados para el bádminton, tirolesa, canopy, rappel, kamikaze, caza, pesca, gimnasio, juego de pin pon, bicicletas de montaña, parque infantil, piscina para mayores y niños, además de cine, karaoke, sala de juegos, sapo y taba, fogata nocturna, hamacas, pozas en el río, quincho, aparcamiento.
Disponen de dos salones para eventos, cursos, uno para 36 personas y otro para 60 personas, que tienen proyector, pantalla gigante, con equipo de sonido y micrófonos.
Cortez cuenta que quieren implementar un salón de eventos para 150 personas con aire acondicionado, calefacción; el juego extremo de la catapulta; un rocódromo para escalar; instalar el rapel y una piscina más grande.

Hotel estancia San Vicente
El Hotel Estancia San Vicente está ubicado en Juntas del Rosario a 45 kilómetros de Tarija pasando Chococla, a 20 minutos del Valle de La Concepción. Para llegar se toma un micro del mercado Campesino sobre la avenida Froilán Tejerina, los que dicen Chocloca.
La Estancia San Vicente es un lugar que se ha mantenido intacto con los años, la hermosa casa de hacienda fue construida por los Jesuitas en el año 1572, la misma que era un territorio en el que se ejercía el régimen antiguo del Curato.
En 1976 la familia Chamas – López inicia la restauración de la antigua casa de hacienda y emprende la recuperación de la plantación de vides para la producción de vinos y singanis, ofreciendo el entorno perfecto para relajarse y disfrutar de la preservada naturaleza, donde se encuentran la bodega con los alambiques a base de leña.
La Estancia San Vicente le brinda comodidad, paz y confort, donde el visitante y su familia podrán disfrutar de una placentera estadía, ya que cuentan con una hermosa casa al pie de los cerros más increíbles de Tarija, a unos pasos de los ríos Camacho y Alisos, lugar por el cual se le otorga el nombre de Juntas.
El lugar cuenta con habitaciones simples a 140 bolivianos y dobles a Bs. 280, con servicio de desayuno incluido. Tienen una capacidad para 14 personas, tiene 5 habitaciones amplias, 3 con baños privados y 2 baños compartidos.
El almuerzo que puede ser comida típica o lomo, va acompañado de una copa de vino y sale cincuenta bolivianos.
Se dispone de una sala de conferencias, y otra de entretenimiento que cuenta con equipo de música, televisión, DVD y una hermosa chimenea que invita a sentarse al lado y disfrutar del calor del hogar.
También tiene un comedor al frente de la piscina, donde se puede saborear comida típica del lugar, asado o lechón. Para los que prefieren algo suave se puede disfrutar de un rico té en la cafetería, degustar vinos y singanis, disfrutar del arte y paseos al aire libre.
También para disfrutar de los días junto a la naturaleza ofrecen caminatas, cabalgatas, donde podrán conocer los alrededores, la historia del lugar y de la estancia. Entre las futuras proyecciones están contemplados implementar un rapel y juegos de recreación para disfrutar el día.

El valle de Los Cóndores un destino imperdible en Tarija
Disfrute de unos reparadores días de descanso en el Hostal La Torre, en Rosillas a 10 kilómetros de Padcaya. Su principal atractivo es su elegancia y rusticidad que acompañan a un ambiente relajante y de deliciosa cocina tradicional.
Muy cerca de ahí el Valle de los Cóndores les ofrece paseos medioambientales, convivencias con familias, cabalgatas, posas naturales, cursos de cocina criolla y de fabricación del famoso queso rosillano, leche al pie de la vaca y otros.
Por la noche puede compartir con los cantores de la comunidad y tomarse un vino y si desea bailar al son de las guitarras y bombos locales.

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